Carta abierta a Ing. Murphy Paiz RECTOR 2018

“El cuento que ahora voy a contarte, pertenece a” Guatemala, un poco a contramano… “puede ocurrir -ocurre por igual-, en una fonda del bajo o en un -elegante- lugar de” la USAC. Algo así recitaba Horacio Ferer, a su Buenos Aires, pero esta historia no sucede en la Argentina, sucede aquí mismo en nuestra Guatemala.

Eran aproximadamente las 11:45, iba en mi camino hacia mi casa, caminando por los pasillos del recuerdo y la nostalgia de la Universidad de San Carlos de Guatemala, como cualquier persona común y corriente, terminada de contestar mis mensajes en el celular y aprovechaba para ver la hora tomando en cuenta mis siguientes actividades luego de mis clases de Mandarín. Caminando sin mirar al frente -mi error-, se posó frente a mi una motocicleta manejada por un ser humano en repentino frenazo. No, no me asusté, sabía que era algo “tan común” en la Universidad, sin embargo, mientras decidía si quedarme parado o moverme, las palabras que surgieron de mi boca fueron las siguientes: “esto es para personas, no para motos” con el ceño fruncido, claro que sí, si por poco me atropellan en los plenos pasillos de la USAC.

El motorista, decidió hacer el recorrido en “U” solo para encontrarme en la siguiente “cuadra”, detener su moto frente a mi, tal cual lo hace cualquier “motoladron”, atravesándola y pronunciando lo siguiente: “¿cuál es tu problema vos @”$%!?”

  • “mi problema es que este es un paso para personas, no para motos, como bien habrás podido darte cuenta”.
  • “todos pasan con motos aquí, y la gente educada se hace a un lado”.
  • “jaja, ¿la gente educada se hace a un lado?”
  • “Si, la gente educada se hace a un lado, pero los Indios como vos, se quedan parados frente a la motocicleta”.
  • “… jaja, ok, los <<indios>> como yo se quedan parados…”
  • “si, los indios imbéciles como vos, se quedan parados”.

En este punto, me ponía a pensar si valía la pena continuar o no, y luego pensaba en el dicho “deja al necio en su ignorancia” y casi, casi, me ganaba este dicho, hasta que pensé: no, el problema de dejar a este necio en su ignorancia era que dañaba a la sociedad, dañaba a mi sociedad, dañaba la sociedad donde se supone vivirán mis hijos, así que continué:

  • “Bueno, supongo que los indios como yo,  tenemos poco raciocinio, quizá por ser indios, como para saber que un sitio para que las PERSONAS caminen, no se espera que sean motoristas los que vayan por ahí”.
  • “Si, sos un indio, porque mirá, toda la gente educada se hace a un lado, pero vos te quedas parado en frente”
  • “ok, ¿vos estudias aqui, en la USAC?
  • “si”
  • “ok, entonces ¿si sabes que esta casa de estudios es para personas, para gente que estudia, no para motocicletas verdad?
  • “¿y vos estudias aquí?”
  • “Si, claro que si, justamente por eso te lo digo”
  • “entonces, ¿por qué no te haces a un lado #@%#!?”
  • “insisto, con toda esa tu inteligencia, dado que sos <<español o ladino>> deberías de saber que las personas caminamos aquí y que cualquier motorista para eso tiene una calle allá afuera y ahí pueden circular”.
  • “¡vos a mi no me vas a mandar!”
  • “En fin, disculpe usted estimado español que este indio mortal ha irrumpido su majestuosa y delicada moto-vía, que tenga usted un buen día, y siga instruyendo con sabiduría a las nuevas generaciones”.

Corrían los inicios de la época lluviosa en el 2008, estudiante de la facultad de Ing. en Ciencias y Sistemas, desarrollábamos (otros amigos y yo) el proyecto del curso de Arquitectura del computador y ensambladores 2 (impartido por Ing. Armin Mazariegos), y en un rincón cerca de la escuela de Ing. Civil, recuerdo haber visto que se acercaron a nosotros Sydney Samuels y Murphy Paiz, en ese entonces Murphy fungía como decano de la facultad de Ingeniería, y recuerdo que nos preguntaron: “¿y qué están haciendo?” respondimos: “un proyecto de Arqui2”

  • “¿con Armin?”
  • “Si, con él”.
  • “¿de qué se trata el proyecto?”
  • “es de un juego de memoria, con controles para equipos y cañonera, para mejorar y reforzar su aprendizaje”.
  • “miren, ustedes que interesante, y ¿por qué no hacen algo para educación vial?”
  • Ronmell: “por qué no vamos a diseñar algo que no nos serviría actualmente”.

¡Error!, lo acepto, error total del jóven Ronmell, apenas con 21 años, inocente e ignorante de muchas cosas, que en este entonces no tenía ni una sola idea de lo que esa frase realmente significaba. Pasaron los meses y por allá por finales del año 2010, recuerdo haber tenido que esperar 1 semana, yendo lunes, martes, día a día, en busca del decano, para la respectiva firma de autorización de la impresión de la Tesis, hasta que finalmente un viernes a las 14:43 logré la firma que tanto necesitaba. Tomando en cuenta que la gente que solo regresa al pasado para revivirlo, le hace daño a Guatemala, con mucho gusto, es un episodio del pasado, y lo dejaré ahí porque de nada me sirve tratarlo ahora.

Quiero filosofar un poquito acerca de las palabras de este joven en la motocicleta dentro de la USAC; “los educados se hacen a un lado de las motos pero los indios se quedan parados en frente”.  Es decir, los que tienen un grado académico superior a la media (educados) deben hacerse a un lado, cuando ven que, sobre un espacio reservado para peatones (personas) va un motorista, eso explicaría la primer porción. La segunda haría referencia a que el cerebro de los “indios” como yo, deberían tener un proceso de raciocinio más lento y por ende quedarse parados frente a la motocicleta (en estas condiciones), voy a asumir que, dado el común denominador, al decir “indios” se hace referencia a los descendientes de los nativos de este pais, Guatemala, es decir, si llevamos esto a ciencia dura, entonces los “educados” deberían tener mas y mejores conexiones neuronales para reaccionar rápidamente y hacerse a un lado, mientras que los “indios” como este humilde servidor, por ende tendrían menos de 45 billones de conexiones neuronales, lo que ocasionaría que no lográramos reaccionar tan rápido, y lo que haría nos quedáramos parados frente a esta moto “no sabiendo qué hacer” ante tal ser superdotado que conduce este vehículo. Quizá a este punto, como lo establece la iniciativa de pueblos indígenas, sería bueno definir las fronteras de los “ladinos” y los “indios” o indígenas. Aunque como diría mi profesor de “social humanística”: “con toda la mezcolanza que pasó aquí, gracias a Dios no saliste con cola vos Ronmell”. Es decir, de acuerdo al “raciocinio” de éste motorista, el problema de quedarme parado frente a/hacerme a un lado de, una moto es un problema de ADN, que solo los “educados” entienden mientras que los “indios” no. Aunque, aquí ya nos hace pensar en la tesis de: ¿o sea que los “indios” no pueden ser educados?.

Seguramente a este punto  alguien, que está de acuerdo con el motorista de esta historia, ya estará pensando: “pero si en Europa las motos/bicicletas llevan la vía”, seguro, por eso supongo se habrán dado cuenta que también hay pasos diseñados para personas, que tienen ciertas barandas a las entradas para impedir que bicicletas o motos puedan circular, donde, justamente solo personas están autorizadas para circular.

Bueno, ya poniéndonos serios, de colega a colega, Ing. Murphy, en aquel entonces usted era decano, y le ruego me disculpe por no poner atención a su comentario sobre la “educacion vial” en el 2008, sin embargo tomando en cuenta nuestro contratiempo con la carta de la tesis del 2010, creo que estamos a mano. Ahora si, ya puedo expresarme libremente.  En su calidad de Rector de la USAC, la pregunta es: “¿que hacemos?” o si quiero ser muy honesto, se reduce a: “¿qué hará con el tema de la educación vial dentro de la USAC?” o ¿es algo que no vale la pena trat?. Es decir, con todos los cursos libres, escuelas, institutos, facultades, etc., SI, ya logramos que las personas salgan con conocimiento técnico/científico, pero… ¿y cuándo les enseñamos a usar el cerebro? le pregunto a usted, porque como máximo representante de esta casa de estudios (forjadora de mi carrera como profesional) supongo que ahora no sólo tiene la disposición de hacer algo, sino también la oportunidad (músculo necesario) y autoridad para hacerlo.

Como solemos decir en nuestra querida Guatemala “la pacaya” entiendo que no es sólo suya, Ing. Murphy, claro que no, recientemente escuchaba a una venta de motos donde decían “llévate tu moto y te regalamos un casco y tu chaleco”; lo cual es excelente, porque impulsan y refrescan la economía Guatemalteca, pero y ¿qué hacen ustedes señores de las ventas de motos para la educación vial? se los voy a poner sencillo: si su respuesta sería “nada, no me importa”, solo permítanme recordarles que la Guatemala que están destruyendo dejando que sus clientes usen sus vehículos para “saltarse las trancas” es también la Guatemala donde vivirán SUS hijos, no, no, no son solo los míos, son SUS hijos también, o ¿es que son tan miopes como para pensar que esto que están destruyendo solo destruye a los demás? ¿será que está tan enraizado en nuestras venas la miopía de no pensar en el futuro y en el desastre de sociedad que le van/vamos a heredar a nuestros hijos? ¿será que es un mal latinoamericano? en cuyo caso, quizá si era cierto lo que mencionaba este motorista en relación al raciocinio humano dependiendo de la raza… a menos claro que ustedes digan: “la verdad no me interesa, yo me voy a ir de este país” en cuyo caso solo respondería: “mas ayuda el que no…. estorba” o si usted desea, cámbie la frase por la que diría el n-veces filósofo Ricardo Arjona.

Regresando al tema original, Ing. Murphy, ¿cómo le hacemos?, es decir, he escuchado la clásica consigna de “USAC es pueblo” y entonces ¿será que ese es el tipo de pueblo que queremos?, de acuerdo a mis palabras anteriores, entiendo que los estudiantes de la -Tricentenaria- USAC, cumplen su sueño de tener conocimiento técnico y científico en las distintas facultades, y un ¡bien hecho! por ello, (tendría que ser así, tomando en cuenta la proliferación de las universidades hoy en día, que salen de la tierra en montones) pero entonces, y la pregunta es ¿cuándo les enseñamos a usar el cerebro POR EL BIEN de esta sociedad? ¿cómo lo ve? ¿nos apoya?, si no me cree, dése una vuelta por los pasillos de la USAC, tal cuál se daba sus vueltas por los pasillos del glorioso T3, T4, durante sus tiempos de Decano, ¿recuerda? cuando nos levantaba el ánimo con su clásica frase de “¿como vamos/está líder?”.

Y para finalizar, tal cual a la “antigüita” -diría mi Madre-, me suscribo de usted.

Atentamente,

Ronmell.

Postdata: aquí le dejo un recuerdo de la “educación (vial)” en nuestra casa de estudios. USAC.

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