“los buenos somos más”
Seguramente hemos escuchado esa frase en casi el 90 de las conversaciones sobre temas sociales o políticos, de personas que consideramos altamente positivas. La frase no hay que tomarla a la ligera, cuando alguien se refiere a que “los buenos” son más o somos más, sólo queda una interrogante bien sencilla que encaja justo después de la misma:
¿entonces por qué estamos tan mal?
Conversábamos con un amigo justamente sobre este tema, y ya cuando una persona con sus cinco sentidos bien aterrizados e informados (sin tomar alguna postura como izquierda, derecha, y esas cosas raras) se pone a pensar un poco más profundo en la frase tan sencilla “los buenos somos más” y ésta es cotejada con situación de nuestro país entonces solo quedan dos caminos.
- O nuestra definición de “buenos” está totalmente errada.
- O la frase “los buenos somos más” es totalmente falsa.
Y es que es bien sencillo, con “tantos” “buenos” que hay en este país, seríamos el país que pintan en los cuadros de aquella religión que vende el paraíso con imágenes bonitas de personas jugando con animales salvajes, ustedes entenderán.
Si tomamos la primera opción, entonces tomamos el camino más largo, ya que lo de “bueno” es tan subjetivo, que seguramente lo primero que viene a la mente es aquella figura eclesiástica que envía mensajes bonitos y positivos y que al final termina impactando tanto a la gente que decide seguirla. Y bueno, quizá nos podría funcionar, a no ser porque… la religión es casi igual de vieja que la política y pues así es como tenemos los resultados.
Si tomamos la segunda opción, entonces esta tiene un poco más de sentido y también proporciona un camino más racional y “bonito”.
Generalmente hemos escuchado las estadísticas de que cuando una persona está mas acercada a la educación piensa, piensa y repiensa el hecho de reproducirse como especie, por cuestiones de costos, responsabilidad, entre otras cosas. Generalmente la gente con poca educación es la que piensa poco (si es que piensa) para reproducirse como conejitos…
Esta bien, a este punto ya tengo el odio de muchos “defensores de las minorías oprimidas”, pero les ruego me tengan paciencia, prometo no hacer tan grande este post.
Regresemos al punto, la reproducción, si tomás en cuenta que “los buenos somos más” entonces esos “buenos” que son más, pasan a ser simplemente personas sin valores ni virtudes y que solo hacen pedazos a la sociedad, de esta cuenta esos que son más, no son los de buenos valores o buenos principios o de buenas costumbres sino que en realidad son los malos que solo destruyen, de otra forma no estaríamos tan jodidos como lo estamos. Ahora si, hablando de la reproducción, si lo aunamos al hecho de que estamos destruidos como sociedad, entonces es bien sencillo concluir que los que deben dejar de reproducirse son esos malos que solo destruyen y deberían reproducirse cada vez más la gente que tiene principios y valores que aporte y construyan una mejor sociedad que NO necesariamente está aunada a la educación en el país, “grandes profesionales” hemos visto haciendo grandes trastadas (diría mi Madre) y que al final se reduce a que en sus hogares les enseñaron a ser “felices” a cualquier costa, y se les olvidó forjarlos como buenas personas, de valores y virtudes para bien.
Si lo anterior es cierto, porque puedo estar completamente errado, entonces las personas con valores y virtudes deberían reproducirse como conejos, solo así un factor de 3:1 (3 niños sin valores contra 1 niño con valor) produce una sociedad como la nuestra, destruida y putrefacta donde lo que importa es lo que está de moda antes resolver cualquier problema de fondo. Si las cosas se cambian, entonces un factor de 2:2 (2 niños sin valores, 2 niños con valores) se balancea la ecuación, porque los 2 niños con valores influirán en los 2 sin valores y no lo contrario como pasa justamente mientras escribo este post. Ahora imaginen un factor de 2:4 (2 niños sin valores, 4 niños con valores) entonces ahí si la frase “los buenos somos más” toma sentido verdadero.
Ahora bien, ¿cómo obtenemos niños con valores?, aquí es donde ya a los adultos no nos gusta, por una simple y sencilla razón, los hijos no son más que el resultado de los padres. Niños sin valores, no son más que el resultado de los padres que simplemente NO están educando a sus hijos con valores, quizá por que estos (padres) no los tengan, en cuyo caso, aunque no justificable, al menos entendible; sin embargo está el caso de que los papás no quieran educar en valores a sus hijos porque simplemente es más fácil “educarlos” a los pies de Disney Channel o a los pies de ESPN o cualquier canal de entretenimiento, ah pero eso si, cuando se enteran de un tema mediático socialmente son los primeros que se rasgan las vestiduras para decir: “ay no, estamos mal como sociedad”.
Voy a terminar este post con una frase que recuerdo de una conversación de las de vehículo, de esas que nacen cuando uno ve que en el semáforo de enfrente están asaltando a alguien…
“Yo le digo a las personas como vos (no era yo) que se reproduzcan como conejos, de otra forma estamos dejando que esa gente mala y sin valores se reproduzcan más y estén llenando este país de replicas de ellas mismas que solo vienen a hacer daño a Guatemala”.
Ya se, la primer explicación es: “eso es un alto costo en nuestros días”, y puede que si, recuerdo a mi profesor de Marketing de la maestría que decía que el 95% de nuestras decisiones son puras emociones intentando ser justificadas con razones, y si él tenía razón, entonces quizá deberíamos pensar en que cuando se habla de “recursos” lo que realmente nos referimos es a sacrificar comodidades por atender necesidades. A menos que las personas sean des-cerebradas que prefieran no tener comida en la barriga por tener los tenis de messi o el TV más gigante para ver los partidos de la super poderosa liga española. En cuyo caso, le recomiendo, en Japón ya hay trasplantes de cerebro, así que no pierda la esperanza.
Gracias por su tiempo, si quiere ayudar a Guatemala, inicie a reproducirse, y recuerde: un hijo es un proyecto de vida.